Cada lectura es una oportunidad para comenzar de nuevo, para escoger con curiosidad aquello que realmente nos atrae. Cuando leemos descubrimos, nos evadimos y viajamos a innumerables destinos con equipajes muy diferentes. Aprendemos de la vida, la misma que en estos momentos se halla alejada para muchas personas. Hoy hasta las palabras soportan dificultades; fragmentos que se agolpan apiñando tramas que reclaman con nostalgia lo que fuimos y lo que tuvimos, y siguen contra viento y marea ayudándonos a no entorpecer lo que está por venir.